Es bastante irracional que la Iglesia Católica dependa de dinero de un Estado que, por ejemplo, reconoce el matrimonio entre personas del mismo sexo, cambios de sexo y ahora la despenalización del aborto.
San Juan 09:38 4/3/2020 - RedacciónSJ
Todos los cultos que hay en la Argentina, menos la Iglesia Católica, se financian en forma autónoma. Sólo la Iglesia Católica tiene al Estado como financista. Pero la situación deberá cambiar para la institución católica, y está trabajando al respecto.
Hay cultos muy activos en sus finanzas, a través de un sistema de diezmos y ofrendas, que a su vez establece una relación más activa entre los clérigos y los fieles. Además, y es el caso de las iglesias evangélicas, esto sucede en un escenario de expansión que le ha quitado membresía a la Iglesia Católica.
Por lo tanto, no se trata solamente de asegurar una financiación no estatal sino de reorganizarse hasta espiritualmente para enfocarse de una manera diferente con la sociedad en general, y los creyentes en particular.
El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) y obispo de San Isidro, Oscar Ojea; y el presidente de la Comisión para el Sostenimiento de la Acción Evangelizadora de la Iglesia, Guillermo Caride, presentaron las conclusiones de un estudio de opinión y mercado que indagó sobre las actitudes, valores y comportamientos de la sociedad hacia la Iglesia católica, informó el diario El Cronista Comercial.
Esto sucedió en un marco muy especial: la Iglesia Católica Argentina articula un plan que pretende generar nuevos mecanismos de financiación de su tarea, acelerando la renuncia progresiva a las remuneraciones y asignaciones que los obispos y sacerdotes reciben del Estado nacional.
En noviembre de 2018, en ocasión de un acuerdo entre la por entonces Administración Macri y el Episcopado, las asignaciones a prelados, sacerdotes y seminaristas cayeron 30% en términos reales para el Presupuesto 2019. El propósito de la Nación era eliminar las asignaciones en un período de e2 años.
Y la administración de Alberto Fernández decidió mantener el plan.
Ahora, los resultados de la encuesta pretenden definir "acciones viables para la donación de recursos a la Iglesia" y "optimizar la tarea comunicacional para dar a conocer su obra evangelizadora", esfuerzo que incluye "una página web oficial de donaciones" a una diócesis particular o parroquia".
De acuerdo a la encuesta, hay "una importante disposición a donar para sostener la obra de la Iglesia", tanto de personas que se identifican como creyentes como de otros que valoran la tarea social de la institución.
Desde 2019, la Iglesia obtiene recursos de los colegios confesionales, dando la posibilidad a los padres que envían a sus hijos a las escuelas parroquiales de pagar sumas fijas.
Quedan afuera de esta política los colegios de órdenes o congregaciones religiosas (jesuitas, salesianos, etc.) y las de movimientos eclesiales.
Según el relevamiento
- Cerca de la mitad cree que el Estado es el principal sostén de la Iglesia Católica, luego los aportes de los fieles y después el Vaticano.
- 16% desconoce cómo se financia la Iglesia
- Cerca de la mitad considera que los beneficiarios del trabajo de la Iglesia son los religiosos (curas, obispos, monjas).
- 33% de los entrevistados consideró que la Iglesia no necesita más dinero.
- Un tercio cree que sí está necesitada de aportes.
- 6 de cada 10 piensan que el responsable de sostener a la Iglesia debería ser el Vaticano
- 42% cree que los fieles deberían sostener a la Iglesia.