La revista publicó un artículo en el cuestiona la orientación económica que tomará el presidente electo, Alberto Fernández.
San Juan 11:43 8/11/2019 - RedacciónSJ
La revista Forbes publicó un artículo en el que plantea que la economía de la República Argentina es “patética”. En esta publicación, además, trazaron vaticinios bastante sombríos por el peso decisivo de la deuda externa sobre las posibilidades de maniobra que tendrá el nuevo Gobierno, encarnado en la figura de Alberto Fernández.
El periodista Kenneth Rapoza fue el encargado de escribir este artículo que fue titulado “Bonos argentinos: buena suerte para entender la deuda argentina”. En este escrito repasa que el Banco Central argentino tiene aproximadamente 10.000 millones de dólares y el Gobierno le debe al FMI 22.000 millones de dólares en el 2022 y otros 22.000 millones en 2023.
“Incluso si el FMI lo redujera a 11.000 millones de dólares en 2022, todavía son 1.000 millones de dólares más que lo que el BCRA tiene de reservas. Y eso no cuenta los miles de millones que debe este año y el próximo, tanto en moneda local como en dólares”, detalló dando a entender que la crisis en Argentina es muy grave. Por otro lado, Kenneth explicó que Alberto Fernández, el presidente electo, todavía no dio mensajes claros acerca de cómo le pagará al FMI y mucho menos a los prestamistas privados.
“Su primer viaje al extranjero fue a México, un país con el que casi no tienen nada que hacer, mientras que él y su vicepresidenta (Cristina Fernández de Kirchner) lideran a los partidarios de ‘Lula libre’, el expresidente encarcelado de Brasil”, informó el periodista de Forbes, demostrando que tiene mucha información y que las relaciones internacionales también influyen en la economía del país.
Finalmente, se refirió específicamente a las necesidades de financiación para renegociar la deuda con el Fondo Monetario Internacional. “Morden cree que las negociaciones de la deuda se volverán cada vez más tensas debido a las ‘tácticas de culpa’ del Gobierno de Fernández. Los controles, el tipo de cambio desdoblado y el renacimiento del ‘mercado libre’ probablemente crucen la proverbial ‘línea roja’ con la ortodoxia financiera del FMI. Eso podría complicar aún más las discusiones sobre política económica para salvar a la Argentina, por enésima vez”.