El Intendente Fabián Gramajo y el Presidente del Concejo Deliberante Ariel Rivero deben “aguantarle los trapos” sí o sí a Franco Félix, quien fuera allanado por falsificar datos de dos médicos además de truchar carnets de vacunación.
San Juan 06:08 p.m. 05/12/2018 - RedacciónSJ
La salida del Concejal, haría insostenible la situación política del oficialismo a tal punto que el jefe comunal podría eventualmente ser eyectado de la intendencia.
Por esa razón, la urgencia los desespera. No es una cuestión de amor por el edil allanado, sino solamente de números.
Tras la salida del bloque de la Marta Lucero esposa del ex Secretario de Gobierno, en el Concejo Deliberante están 5 opositores y 5 oficialistas. Para mantener la mayoría, debe siempre desempatar con su voto doble el Presidente que es Rivero.
Pero la eventual ausencia de Félix por renuncia o despido porque el Juez Federal lo detenga por los ilícitos denunciados, termina con la mayoría forzada.
De forma automática, el cuerpo deliberativo oficialista quedaría en inferioridad de condiciones.
Ante esta situación el voto doble de Rivero desparecería, ya no quedarían 6 a 5 el por el sistema doble sino solo con cuatro votos. La presidencia, se queda sin la opción del voto doble por empate.
Bajo esa circunstancia, no podrían aprobar nada por mayoría tal y como viene sucediendo hasta el momento.
Muchos de los pedidos de informes fueron hechos por irregularidades como también la interpelación de sus funcionarios, todo ello murió en un cajón aplastado por el peso de la mayoría.
Sin Félix, los números serían 5 a favor de la oposición mientras que 4 del oficialismo razón que los obliga como se dice en el lunfardo a “fumarse al acusado”.
El presidente del Concejo tiene que mantenerlo a como de lugar, pero además ningún gramajista tiene que faltar –incluido Félix - en lo que resta de este año y todo el 2019. De suceder, el oficialismo solo quedaría con tres ediles, desventaja total con una oposición dispuesta a ir a la yugular de los actos irregulares de la administración Gramajo. Además la oposición, tendría quórum propio.
El denunciado lo sabe, especula con los números. Obligará tanto a Gramajo como a Rivero a negociar con él lo que le plazca. Hasta ahora, es un apoyo irrestricto en su defensa no solo desde lo legal sino también en lo político desde el Concejo Deliberante.
Tan complejo es el panorama, que de irse Félix por la banderola el Concejal que asumiría no es del riñón del Intendente. Podría abrir bloque aparte, un detalle nada menor votaría contra la gestión gramajista lo que se interpreta como otra firme razón para el espanto.
Las desventuras del edil presidente del bloque, pone en serio riesgo a la gestión de Fabián Gramajo. El jefe comunal, tiene cerca de 10 denuncias en el Tribunal de Cuentas por serias irregularidades en la administración.
Por estas horas, en los pasillos municipales se habla de "un misil judicial” que podría caer en la gestión.
De ser así Gramajo, podría ser eyectado mediante un juicio político e impedido de ejercer cargos municipales.
Tal vez como reza una parte del tango Mano a Mano: “como juega el gato maula con el mísero ratón”, la pregunta queda abierta ¿ en qué momento rotan los roles de convertirse cada uno en gato maula o mísero ratón ?.
Fuente: Legisla TV