En medio de la malaria de los presidenciables peronistas, el triunfo de Uñac lo ubicó automáticamente en esa grilla.
La liga de gobernadores peronistas entró en fase crítica después de los magros resultados que sacaron varios de sus principales referentes, especialmente Juan Manuel Urtubey y Juan Schiaretti, y en las últimas horas empezó a sonar con fuerza el nombre del sanjuanino Sergio Uñac como nuevo líder del grupo y potencial candidato de relevo del salteño.

"Este es el triunfo más contundente que podamos recordar y también en el orden nacional (...) somos de las provincias peronistas que mayor ventaja ha logrado con nuestros circunstanciales adversarios", sacó pecho Uñac, que enseguida aclaró que el "posicionamiento" que logró a nivel nacional lo usará sólo con el objetivo de defender a su provincia.
"San Juan está primero y por encima de cualquier interés particular. Es un triunfo que visibiliza a la provincia y a la gestión dentro del orden nacional", aseguró el gobernador, que además tiene el mérito de haber logrado la unidad con el kirchnerismo duro, algo que otros mandatarios no consiguieron y les terminó costando el triunfo como a Urtubey y Domingo Peppo.
Lo cierto es que más allá del posicionamiento nacional, el objetivo más inmediato de Uñac es consolidar su poder interno, en medio de una sorda disputa con José Luis Gioja. A futuro, el gobernador ya aclaró que piensa buscar la reelección en 2019, y recién en 2023 analizaría una incursión nacional. Pero de todos modos, los resultados del domingo lo ubican como un posible líder de la liga de gobernadores.
"Él estaba en sintonía con Urtubey y algunos anoche en el PJ ya insistían con la idea de que él sea quien encabece la renovación del peronismo", dijeron a LPO fuentes al tanto de la interna sanjuanina. La buena sintonía con el salteño fue destacada por el propio Uñac, quien afirmó que "con Urtubey tenemos buena relación, recorrió el país e hizo las cosas bien". Pero enseguida aclaró que "los resultados no lo acompañaron" y agregó que la doctrina de los peronistas "debe estar acompañada de resultados electorales". Una sutileza para el salteño que ni siquiera alcanzó el cuarto de los votos en su provincia.
Más allá de las intenciones de Uñac de cara a 2019, lo cierto es que el PJ se ha quedado con pocas cartas en la mano para su plan presidencial. Urtubey no sólo perdió él, sino también quienes lo empujaban en la interna, Schiaretti, Peppo y Rosana Bertone. La esperanza de Pichetto de levantar a Sergio Massa no resultó, y mucho menos la de Florencio Randazzo. Los otros ganadores dentro la liga fueron Juan Manzur y Lucía Corpacci, ninguno con perfil presidenciable.

Sólo de los hermanos puntanos se podría esperar algún intento de ir por la presidencia nuevamente. Otro ganador del peronismo pero en una escala menor fue el rionegrino Martín Soria, que en 2015 relegó la posibilidad de ir por la gobernación para que lo haga Pichetto, pero esta vez no perdió tiempo y anoche mismo lanzó su candidatura.
Fuente: LPO