-JUDICIALES-
Juicio por YPF: el fondo de inversión solicitó embargar acciones y bienes de la petrolera para saldar la deuda

Burford recurrió a la jueza estadounidense Loretta Preska, que condenó a la Argentina a pagar USD 16.000 millones por la impericia en la estatización de la empresa por parte del gobierno de Cristina Kirchner en 2012.

San Juan 17:06 28/2/2024
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Como consecuencia de la demora del nuevo gobierno argentino ante el reclamo por el pago de los 16.000 millones de dólares como condena por la expropiación de YPF, que determinó la justicia de los Estados Unidos (EE.UU), el fondo de inversiones Burford Capital solicitó el embargo de acciones y bienes de la compañía. 

En un escrito de 122 páginas presentado ante la jueza Loretta Preska, del Distrito II de Manhattan, el fondo tenedor de la deuda pidió que se informe sobre la cantidad de activos y bienes potencialmente embargables para completar el pago de la sentencia. 

De este modo, se solicita que distintas propiedades del Estado Argentino se evalúen para ser embargadas en el caso de que la administración de Javier Milei no llegue a un acuerdo para el pago de los 16.000 millones de dólares, como definió la justicia de Nueva York a mediados del año pasado.

Según la presentación judicial se incluyen acciones de YPF en manos del Estado en Caja de Valores, cuentas, activos, deudas y transacciones valuados en más de un millón de dólares, así como concesiones para la exploración de recursos naturales, activos de Aerolíneas Argentinas, ARSAT, ENARSA y Banco Nación, entre otros. 

Entre la información solicitada por la firma acreedora se destaca además, el swap de monedas acordado entre el Banco Popular de China y el Banco Central de la República Argentina, lo que implica más de la mitad de las reservas internacionales brutas del país.

Vale destacar que la demanda contra Argentina se elevó en 2012, tras la decisión de expropiar la petrolera en manos del grupo privado español Repsol, por parte de la entonces presidenta Cristina Kirchner y su ministro de Económica, Axel Kicillof. Tras la impericia en su accionar la firma recurrió a la justicia norteamericana y con el correr de los años un fondo de inversión compró la demanda, que terminó siendo desfavorable para el país.