San Juan 09:02 7/6/2022
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Los efectos de la guerra en Ucrania, especialmente el aumento de los precios de la energía y los alimentos, elevarán la pobreza al 33,7 % y la pobreza extrema al 14,9 % este año, lo que implica un aumento del 1,6 % y 1,1 % con respecto a 2021, respectivamente. Así lo alertó este lunes la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
El organismo regional, con sede en Santiago de Chile, aseguró en su informe “Repercusiones en América Latina y el Caribe de la guerra en Ucrania: ¿Cómo enfrentar esta nueva crisis?” que el conflicto provocará que 7,8 millones de personas se sumen a los 86,4 millones que ya están en pobreza extrema y sufren inseguridad alimentaria.
“Estos niveles son notoriamente superiores a los observados antes de la pandemia y alejan la posibilidad de una pronta recuperación”, aseguró la Cepal.
Colombia, México y Brasil, grandes afectados
La inflación empezó a aumentar en Latinoamérica a mediados de 2021, debido, principalmente, a las ayudas fiscales otorgadas durante la pandemia y al aumento del consumo. La región cerró con una tasa promedio del 6,6 %.
En abril pasado, la inflación regional se disparó a 8,1 % y la mayoría de bancos centrales anticipan que se mantendrá elevada en lo que resta de año.
“El impacto del alza de precios y de la baja del crecimiento en la pobreza será diferente de un país a otro.
Colombia, México, el Paraguay y el Brasil tendrá lugar un fuerte retroceso de la lucha contra la pobreza”, indicó el documento.
El organismo agregó que la inflación, además, “perjudica no solo a las personas extremadamente pobres, sino también a los hogares de las partes media y media baja de la distribución del ingreso” porque “la participación de los alimentos en la estructura de consumo de los hogares aumenta a medida que disminuye el ingreso”.
Para enfrentar el inusitado aumento del precio de los alimentos, Cepal pide no restringir el comercio internacional de alimentos y fertilizantes, mantener o aumentar los subsidios a alimentos y reducir o eliminar aranceles a la importación de granos y otros productos básicos.
Más integración regional
A la inflación se suma “el contexto externo de incertidumbre y la desaceleración de la actividad económica y el comercio en la región”, de acuerdo con el organismo.
Tras el rebote económico del 6,3 % registrado en 2021, el producto interno bruto (PIB) regional alcanzará en 2022 un crecimiento anual promedio de 1,8 %, según proyectó la Cepal en abril.
Latinoamérica tiende así a regresar al lento patrón de crecimiento del periodo 2014-2019, cuando el promedio anual de expansión del PIB era solo del 0,3 % promedio anual.
Latinoamérica tiende así a regresar al lento patrón de crecimiento del periodo 2014-2019, cuando el promedio anual de expansión del PIB era solo del 0,3 % promedio anual.
Los mayores precios de las materias primas, el aumento de los costos de transporte y las perturbaciones en las cadenas internacionales de suministro impactarán también las exportaciones de bienes de la región.
En diciembre de 2021, la Cepal proyectaba un aumento del 10 % del valor de las exportaciones regionales de bienes y del 9 % del valor de las importaciones.
Sin embargo, el alza de los precios de varios de los principales productos que la región comercializa eleva la proyección para 2022 a una expansión del 23 % tanto de las exportaciones como de las importaciones.
Cimoli instó a “ampliar el espacio fiscal y aumentar los ingresos, permitiendo también aumentar las inversiones a la vez” y “aumentar el papel de la articulación regional en las respuestas a la crisis”.
“Es una región que unida gana y separada pierde en materia de alimentos, de hidrocarburos, de energía. Es algo que tenemos que tener muy claro si queremos avanzar hacia la integración regional”, concluyó.