EN MEDIO DE LA CUARENTENA
Pobreza y muerte: Dos datos preocupantes, fuera de balanza

En medio de la cuarentena por la pandemia de coronavirus, se conocieron dos datos: por un lado, que el país superó la marca de los 1500 muertos por Covid-19, por otro, que el nivel de pobreza trepará hasta el 45% en estos últimos meses.


San Juan 10:22 6/7/2020 - RedacciónSanjuan@

Ambos datos serían tenidos en cuenta a la hora de analizar el aislamiento, sin embargo, no se nota el uso de la balanza para tal fin. Pues, se sabe que los dos flagelos generan muertos, la mayor diferencia está en la cantidad y en la inmediatez.

En las últimas 24 horas fallecieron 26 personas y el país registra ahora 1507 decesos por la pandemia de Covid-19. Así lo confirmó el Ministerio de Salud anoche.

Desde el reporte matutino, se registraron 17 nuevas muertes, las cuales se sumaron a las 9 confirmadas por la mañana. 10 hombres, 4 de 82, 78, 79 y 65 años, residentes en la provincia de Buenos Aires; 5 de 60, 84, 61, 71 y 82 años, residentes en la Ciudad de Buenos Aires (CABA); uno de 73 años, residente en la provincia de Neuquén; y 7 mujeres, 2 de 70 y 78 años, residentes en la provincia de Buenos Aires; 4 de 89, 91, 69 y 82 años, residentes en la Ciudad de Buenos Aires (CABA); y una de 82 años, residente en la provincia de Río Negro.

La letalidad del coronavirus aún se discute. Pero, ¿quién discute las muertes que genera la pobreza?

"Las medidas de aislamiento dispuestas para morigerar el avance del coronavirus impactaron sobre los ingresos de los sectores de bajos recursos y eso hizo que el nivel de pobreza trepará hasta el 45% en los últimos meses", dijo en las últimas horas el director del Observatorio Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), Agustín Salvia.

"La caída de los ingresos laborales de los sectores informales de clase media baja duplicó el déficit de la canasta básica", explicó en diálogo con 'Radio 10'. "Teníamos 8% antes de la pandemia y hoy tenemos 16%" de hogares del área metropolitana de Buenos Aires "que no cubren la canasta básica", detalló.

Consideró de "gran impacto" la incidencia de la pandemia sobre la economía y dijo que esta situación "desnudó los problemas estructurales que tiene la sociedad argentina en cuanto a dificultades para generar una rápida recuperación".

En lo que respecta al índice de pobreza, Salvia explicó que las últimas proyecciones que se realizaron en la segunda quincena de abril "dieron como resultado estimado un nivel de pobreza del 45%".

"Hoy hay dos tendencias. Una en el interior, en las localidades donde hubo reapertura económica. Y otra, como en el área metropolitana, donde no la hubo y en la que seguramente se ha incrementado la pobreza", agregó.

"La crisis ha golpeado a los sectores informales pobres, los cuales han tenido un piso de protección social a través de los programas de transferencia de ingresos, pero están perdiendo sus fuentes de trabajo por la reducción de la demanda", indicó.

"Estructuralmente es de esperar que de esta crisis se salga lentamente de aquellas actividades que el sector informal tenía como más habitual", dijo.

Salvia remarcó que el trabajo informal en el mediano plazo será "escaso" y que, desde el punto de vista estructural, esto significará "una profundización de la pobreza, no solo por ingresos, sino en cuanto a capacidades de consumo e inversión en el propio desarrollo humano personal, familiar o comunitario".

"La pobreza estructural no solo se visualiza en los asentamientos precarios, también va afectando a las áreas urbanas, porque se va perdiendo la fuente de trabajo y se empieza a desinvertir en la alimentación, en educación, en la vivienda, y esto fomenta un proceso de empobrecimiento estructural y de mayores desigualdades sociales", concluyó.

Antes, un estudio de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), reveló que el derrumbe de la economía y el aumento del desempleo debido a los efectos del coronavirus dejarán en la pobreza al 58,6% de los niños argentinos a fin de año, desde el 53% del 2019.

Y si bien los números del Covid y las medidas que tomó el gobierno al respecto resultan exitosas en comparación con varios de los vecinos sudamericanos, la contracción de la actividad productiva, en un país que lleva ya algunos años de una grave crisis económica, está mostrando la otra cara de la pandemia.

"Ya tenemos un nivel de crecimiento de la pobreza que va mucho mas allá de lo que Argentina podía prever aun en sus peores pesadillas", señaló Roberto Valent, coordinador residente de la ONU en Argentina a 'Reuters' .

"Se trata de un aumento fuerte de pobreza y hablamos también de más o menos el 58,6% de pobreza a nivel de niños, niñas y adolescentes", explicó.

El presidente fue consultado varias veces por ello. En algunas ocasiones respondió con frases del tipo: "Prefiero tener 10% más de pobres a que mueran 100 mil personas (en referencia a las muertes por coronavirus)".

Hipótesis que no se conoce si es cierta. Algunos especialistas estimaron en 40.000 los decesos si no se hubieran tomado las medidas adecuadas para controlar la pandemia en Argentina.

Pero, en cualquier caso, la frase presidencial parte del supuesto de que un 10% más de pobres podría generar muchas desgracias, pero no muertes, nada de lo que no se pueda volver.

El problema es que la pobreza y las crisis económicas siempre terminan provocando víctimas fatales. Y cuanto más profundas son, más muertes provocan.