Víctor Manzanares, detenido en el marco de la causa Los Sauces, brindó declaración ante el juez Julián Ercolini y admitió enmiendas con “liquid paper”, aunque dijo que “no obedecieron a ningún error malicioso”.
El histórico contador de la familia Kirchner, Víctor Manzanares, confesó que adulteró los libros contables de Hotesur a pedido de la exmandataria y senadora Cristina Fernández de Kirchner (FpV-PJ). Manzanares, quien se encuentra detenido en el marco de la causa Los Sauces, brindó declaración indagatoria ante el juez federal Julián Ercolini y el fiscal Gerardo Pollicita -en la causa Hotesur-, y reconoció haber borrado con “liquid paper” datos de un papel clave para la conformación del nuevo directorio de la empresa que controla el complejo hotelero Alto Calafate. Sin embargo, el contador justificó que lo hizo por encargo de la expresidenta y señaló que las enmiendas “no obedecieron a ningún error malicioso”. “Hotesur S.A. era una sociedad cerrada y de familia”, sostuvo. Explicó que luego del fallecimiento de Néstor Kirchner colocó en las actas que concurrían Cristina Fernández, Florencia Kirchner y Máximo Kirchner -diputado nacional del FpV-. Pero posteriormente la sobrina de Cristina, Romina Mercado, le acercó a su tía los libros e “indicó que debía consignarse que concurría a esos actos Máximo Kirchner por sí y en representación de la sucesión de su padre”. Entonces, lo modificó. La causa judicial fue impulsada por la exdiputada Margarita Stolbizer (GEN). En la investigación se encuentran Cristina y sus dos hijos, Máximo y Florencia, acusados por presunto lavado de dinero, proveniente de coimas de contratistas de obra pública, como el detenido Lázaro Báez, a través de la simulación de alquileres de habitaciones de hotel de parte de la sociedad Hotesur.