El Dr. Miguel Quiroga Barragán, referente del Comité Provincial de Ética Biomédica dio detalles de las funciones y reveló lo actuado en este último año en que el Comité se propuso atender la resolución de conflictos éticos relacionados con el campo de la atención de la salud, la educación en salud y la investigación biomédica.
Barragán explicó que “lo que la Comisión ha hecho ha sido reflotar lo que estaba creado, actualizamos lo que había, que era de 2003. Se renovaron las invitaciones a distintas instituciones para que envíen representantes con el objetivo de que el COPREBI sea lo más amplio posible y estén representados distintos sectores de la sociedad”. Y agregó que “El COPREBI tiene varias funciones pero entre ellas se destaca la función praxiológica, o sea, la atención de casos puntuales cuando hay un conflicto bioético. Esto es, distintas opiniones que de alguna manera se contraponen o que requieren una decisión en casos en la que está comprometida la salud o la vida de una persona”. “Y tiene también otras funciones que son más consultivas, de asesorar. La tarea es cumplir con una recomendación, un Comité de bioética o COPREBI en este caso interviene, analiza el caso, entrevista a las personas en la medida que sea necesario, emite una recomendación y después se toman las decisiones del caso”, sostuvo. Asimismo el profesional resaltó: “Además hay una función que va implícita en todo esto que es la función docente. Siempre se está cumpliendo una función más o menos docente. Hay que anticiparse a los conflictos, por ejemplo, acudir a elementos de prudencia, facilitar la comunicación entre las personas que eventualmente puedan tener discrepancias, si se facilita la comunicación los desacuerdos siempre son menos”. “Cualquier Comité de bioética puede ser consultado por las personas que están transitando una situación difícil y que no saben o no pueden o no tienen cómo resolver dentro de su conciencia esa situación. No está limitado a las autoridades de salud pública, también puede ser un médico, una enfermera o un miembro del equipo de salud”, añadió. “Estamos con las puertas abiertas ante estas situaciones conflictivas, esto suele acompañarse de un estudio más o menos permanente ya que los mismos casos que se van presentando van generando preguntas y esto da motivaciones de estudio”, dijo Barragán. Para finalizar dijo que “Sería muy interesante que se tuviera más conciencia en general de la existencia de la bioética como una ciencia al servicio de la seguridad de las personas. Especialmente de los más vulnerables, tanto porque son personas enfermas o porque son miembros del equipo de salud que se ven expuestos a situaciones muy difíciles y tienen grandes dificultades en las decisiones que tienen que tomar”.